16 enero 2024
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1:
La inmunidad de grupo y la salud de los lechones durante la lactancia -
2:
Factores que afectan a la inmunidad de grupo -
3:
¿Cómo se evalúa la inmunidad de grupo en la paridera? -
4:
La inmunidad de grupo y su influencia en los aspectos económicos de la producción porcina -
5:
¿Cómo puede afectar la salud de los lechones a la rentabilidad? -
6:
Resumen
La inmunidad de grupo y la salud de los lechones durante la lactancia
El calostro proporciona a los lechones recién nacidos no solo la energía que necesitan, sino también inmunidad pasiva, esencial para su supervivencia, especialmente en las primeras semanas de vida.
Debido a la estructura especial de la placenta, los lechones nacen sin anticuerpos maternos por lo que deben ser absorbidos a través del calostro. Para que los lechones reciban la inmunidad pasiva vía calostral han de hacerlo durante las primeras 24 horas de vida.
Con un buen nivel de inmunidad de grupo y un correcto manejo del encalostrado es posible reducir la mortalidad de los lechones durante la fase de lactancia. Además, hay otros factores que intervienen en la mortalidad de los lechones y que han de tenerse en cuenta, como pueden ser aquellos relacionados con las condiciones ambientales, el aplastamiento por parte de las cerdas, la bioseguridad, el manejo del parto o la suplementación con hierro.
Factores que afectan a la inmunidad de grupo
Algunos de los factores que influyen en la inmunidad de grupo son la bioseguridad, el manejo y por supuesto, las vacunas.
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Bioseguridad
El plan de 20 puntos de Madec proporciona una buena base para la bioseguridad interna de la granja. Algunos de los puntos críticos son:
- Manejo todo dentro-todo fuera (TD-TF): no mezclar edades (flujos de lechones unidireccionales) junto con el manejo TD-TF ayuda a poner cortafuegos en la transmisión de enfermedades entre los diferentes lotes.
- Adaptación de las nulíparas: la correcta exposición y adaptación de la reposicióna los patógenos presentes en la granja antes de la primera gestación es muy importante de cara a la sanidad, no solamente del rebaño de reproductoras, sino también de toda la línea de producción. Lo ideal es que esta exposición se realice a través de la vacunación.
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Manejo en lactación
- Las vacunas mejoran la inmunidad de grupo
¿Cómo se evalúa la inmunidad de grupo en la paridera?
La evaluación de la salud y la inmunidad de grupo se determina mediante la valoración de anticuerpos a través de análisis laboratoriales. La técnicas más conocida para ello es el ELISA.
ELISA (Ensayo de inmunoabsorción ligado a enzimas)
ELISA es un método ampliamente utilizado para la detección cuantitativa de anticuerpos frente a patógenos en fluidos biológicos. Esta prueba tiene una alta especificidad y sensibilidad. Se basa en la interacción antígeno-anticuerpo.
La detección de anticuerpos mediante ELISA puede proporcionar información útil sobre la seroconversión y el efecto potenciador que suponen las vacunas y/o infecciones posteriores.
La inmunidad de grupo y su influencia en los aspectos económicos de la producción porcina
Este estudio pudo demostrar que las granjas positivas a estos patógenos respiratorios:
- sufrieron mayores pérdidas económicas en comparación con las granjas negativas,
- aumentaron los costes de alimentación en diferentes fases de producción,
- y, tuvieron un beneficio medio anual inferior.
¿Cómo puede afectar la salud de los lechones a la rentabilidad?
Devillers et al (2011) publicaron un artículo en el que mostraban que los lechones que morían antes del destete
- Tenían un peso más bajo al nacer y un menor aumento de peso en las primeras 24 horas de vida,
- Tenían una temperatura corporal rectal más baja y,
- Habían ingerido menos calostro, con menor concentración plasmática de IgG y glucosa a las 24 horas de vida.
Stygar et al (2022) concluyeron que las pérdidas debidas a la mortalidad de lechones durante la lactancia suponían una pérdida de ingresos y unos costes de producción adicionales de 12 y 23 euros por camada, respectivamente.
Resumen
En resumen, una correcta bioseguridad, la implementación de una buena/adecuada estrategia de vacunación y un buen protocolo de adaptación de nulíparas son puntos críticos si se quiere alcanzar una elevada inmunidad de grupo, lo que sin duda ayuda a mejorar los parámetros productivos y, por tanto, a incrementar la rentabilidad de la granja.