La diarrea en lechones en las fases predestete y destete

25 mayo 2023

La diarrea en lechones es el principal trastorno que los ganaderos porcinos observan durante las fases de predestete y destete. La diarrea en lechones causa importantes perjuicios económicos, no sólo a consecuencia de los animales muertos, sino del mal rendimiento que acarrea la diarrea leve. El retraso del crecimiento, el aumento de los costes y la vulnerabilidad a otras enfermedades son solo algunas de las consecuencias que tiene el no abordar este problema en los lechones.

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¿Qué causa la diarrea en lechones?

La diarrea en lechones surge por causas muy diversas:

  • Nutricionales
  • Fisiológicas
  • Ambientales
  • Infecciosas

Los lechones nacen en un ambiente hostil, plagado de microbios patógenos. Los recién nacidos carecen de defensas inmunitarias, así que las obtienen del calostro, rico en anticuerpos que los mantienen a salvo de la mayoría de patógenos hasta que desarrollan las suyas propias.

 

Cuando los lechones atraviesan el canal del parto adquieren también de la madre cientos de especies de microbios que colonizan el intestino. El microbioma intestinal ayuda a digerir la leche y, después, el alimento sólido. Además, estos microorganismos beneficiosos controlan tanto las bacterias patógenas, causantes de enfermedades, como los parásitos.

Si los lechones no toman suficiente calostro, las bacterias proliferan en exceso y hasta las especies beneficiosas acaban causando daños ante la ausencia de defensas inmunitarias. Cuando la madre no presenta inmunidad frente a una enfermedad determinada, no puede conferir dicha protección a su camada. Por ello, la diarrea en lechones es muy habitual en lechones nacidos de primerizas y uno de los motivos por los cuales los programas de vacunación suelen ir destinados a las reproductoras de baja paridad.

Si se altera el microbioma intestinal, a menudo sobreviene la diarrea en lechones. Esta puede surgir por varias causas: el uso excesivo de antibióticos, la sobrealimentación, los cambios de alimentación o la introducción demasiado temprana del alimento sólido.

El entorno también desempeña su papel: el estrés que genera el hacinamiento, las corrientes de aire, un mal drenaje y el frío favorecen la aparición de esta patología.

Por último, los microbios patógenos intentan infectar a los cerdos y algunos, como E. coli y C. perfringens, han elaborado mecanismos sofisticados para burlar las defensas del cuerpo. 

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  • Tabla 1. Resumen de las causas de diarrea en lechones[NM1] 

Causa de la diarrea en lechones

 Mecanismo

Estrategia de control

Los lechones no toman el calostro suficiente y no reciben la inmunidad pasiva 

El funcionamiento del intestino queda alterado y los microbios patógenos se multiplican.

Uso racional de los antibióticos, higiene rigurosa; disminuir la ingesta de las madres (en los casos de sobrealimentación, es el lechón más grande el que sufre diarrea).

Alteración del microbioma intestinal por:

- Uso indiscriminado de antibióticos

- Suciedad del entorno

- Sobrealimentación

- Cambios en la alimentación

El funcionamiento del intestino queda alterado y los microbios patógenos se multiplican.

Uso racional de los antibióticos, higiene rigurosa; disminuir la ingesta de las madres (en los casos de sobrealimentación, es el lechón más grande el que sufre diarrea).

Causas ambientales:

- Frío en las instalaciones que provocan el enfriamiento de los lechones.

- Corrientes de aire

- Estrés

La inmunidad de los lechones es menor, su capacidad para digerir la leche y el alimento sólido disminuye.

Mejorar las condiciones de la granja y cumplir los protocolos.

Infecciones

Virus y bacterias patógenas y parásitos invaden el intestino.

La higiene, las medidas de bioseguridad, la vacunación y la profilaxis disminuyen la carga ambiental de patógenos.

 

Microorganismos patógenos que causan diarrea

Las infecciones que cursan con diarrea son numerosas. A continuación, repasamos las más representativas.

  • Coccidiosis 

Los coccidios son parásitos que destruyen las microvellosidades del intestino delgado, las estructuras encargadas de absorber los nutrientes, lo que provoca una disminución pronunciada del rendimiento. No suelen causar la muerte del animal, pero favorecen coinfecciones con otros patógenos. La coccidiosis [NM1] produce una diarrea en lechones de consistencia cremosa que puede volverse acuosa cuando otros patógenos están presentes.

La erradicación de los coccidios del ambiente es sumamente difícil porque los cerdos infectados excretan una gran cantidad de ooquistes, huevos sumamente resistentes que infectan a otros cerdos cuando los ingieren.

  • Rotavirus, gastroenteritis transmisible y diarrea epidémica porcina

La gastroenteritis transmisible puede ser devastadora cuando afecta por primera vez a una granja. La enfermedad se desata con rapidez, en menos de un día. Los lechones sufren diarreas acuosas y se deshidratan en poco tiempo.

La diarrea epidémica es similar a la gastroenteritis transmisible, pero su período de incubación es más largo (3 a 5 días) y no se propaga tan rápido, de modo que su control es más fácil. 

La infección por rotavirus causa una diarrea en lechones de consistencia acuosa que suele durar unos pocos días. También provoca deshidratación y las coinfecciones son frecuentes.

No hay tratamiento contra estos virus. Los veterinarios tratan la deshidratación y las infecciones bacterianas secundarias que puedan aparecer.

  • Colibacilosis (E. coli)

Las bacterias E. coli no son perjudiciales la mayor parte del tiempo. Sin embargo, existen cepas enterotoxigénicas que inducen la secreción de una gran cantidad de líquidos a través del intestino, causando deshidratación y diarrea. Suelen afectar a lechones de muy corta edad y causan la llamada diarrea neonatal.

Por suerte, a diferencia de las infecciones víricas la colibacilosis puede tratarse con antibióticos. Es necesario llevar a cabo cultivos y antibiogramas para elegir el antibiótico adecuado. También es fundamental tratar la deshidratación.

  • Clostridiosis

Los clostridios son habitantes naturales del intestino y si el microbioma está sano, normalmente no causan mayores problemas. Ahora bien, cuando está alterado, los clostridios pueden descontrolarse y provocar algunas de las diarreas más graves en los lechones, principalmente la causada por C. perfringens de tipo A. Clostridium perfringens de tipo C es el más mortífero y causa diarrea hemorrágica. Otros tipos también son peligrosos, pero provocan una diarrea más típica de consistencia pastosa.

Impacto en la producción

La magnitud de las pérdidas provocadas por la diarrea depende de su causa. Las enfermedades diarreicas no actúan en solitario, por lo que los signos clínicos suelen ser solo la punta del iceberg.

Por ejemplo la coccidiosis: está presente en el 75 % de las granjas europeas y puede estar infectado hasta el 100 % de los cerdos (Ozsvary, 2018).

Este patógeno causa graves daños en el intestino, de modo que la ganancia media diaria (GMD) queda afectada hasta bien entrada la fase de cebo. El índice de conversión (IC) también se resiente, lo cual lógicamente aumenta los costes. En definitiva, el engorde de los lechones con coccidios es más costoso y más largo.

Prevención de la diarrea

Un punto clave de la prevención es la higiene. Con la intensificación, las normas y los protocolos de higiene deben ser de primer nivel, pues de lo contrario no servirán para prevenir la enfermedad.

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Dado que muchos de los agentes causales de las diarreas se transmiten por las heces, es vital retirarlas y mantener limpios los canales de drenaje. Los roedores, pájaros e insectos y los fómites pueden transportar heces y diseminar los patógenos de un grupo a otro, por lo que el control de plagas y las medidas de bioseguridad internas facilitan la lucha contra la diarrea.

El manejo todo dentro/todo fuera es muy eficaz, sobre todo si va acompañado de desinfección. No obstante, conviene recordar que no todos los desinfectantes son eficaces contra todos los patógenos. Por ejemplo, ¡los ooquistes de coccidios son resistentes a casi todo!

Si una enfermedad se ha convertido en un problema en una granja, entonces hay que considerar la vacunación.

El uso de antibióticos con fines profilácticos (medicar antes de que surjan signos clínicos) está prohibido en Europa. Existe otro tipo de fármacos llamados coccidiostáticos, como por ejemplo el toltrazurilo, que han demostrado ser aliados valiosos en todos los sectores de la ganadería. 

El tratamiento metafiláctico (tratar animales aparentemente sanos cuando otros muestran síntomas) de la coccidiosis en las granjas positivas reduce la diarrea entre un 83% y un 98% y disminuye la mortalidad causada por las infecciones secundarias hasta en un 63% (Ozsvary, 2018). Esta estrategia suele ser más rentable que esperar a que los cerdos sufran diarrea y tratar con antibióticos las infecciones cuando aparezcan. Los lechones tratados presentan una ganancia diaria de peso de 25 g mayor que los no tratados, incluso en ausencia de diarrea (Maes, 2007). 

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