En una granja porcina cohabitan múltiples agentes infecciosos con capacidad para infectar a los animales de forma repetitiva. Incluso en una granja porcina de mayor nivel sanitario (negativas a PRRS, Mhyo, App, sarna, rinitis, disentería, ileítis…) pueden ser positivas a agentes con alto potencial patógeno (Influenza, S.suis, G.parasuis, M.hyorhinis, Salmonella, E.coli, Rotavirus …).
Es prácticamente imposible lograr una situación de ausencia de agentes infecciosos. Debemos aprender a convivir con ellos combinando 2 aspectos clave:
Se trata de tratar las enfermedades no solo a nivel individual, sino poblacional. Esta es la clave para alcanzar la estabilidad sanitaria.